En el marco de las Eliminatorias Sudamericanas, donde cada detalle cuenta para asegurar un puesto en el próximo Mundial, Venezuela había mostrado un desempeño defensivo sólido en casa. Sin embargo, este jueves 10 de octubre se rompió esta destacada racha.
El gol de Argentina, anotado por el defensor central Nicolás Otamendi, fue el primero que recibió Rafael Romo, portero de la selección venezolana, jugando en casa durante esta fase clasificatoria. Hasta ese momento, Romo había mantenido su arco invicto en territorio nacional.
Este acierto rompió una racha de cuatro partidos sin conceder goles como local, el último gol que Venezuela había recibido en casa fue el 23 de marzo de 2017, cuando el delantero peruano Paolo Guerrero anotó en eliminatorias.
Con la sólida defensa que ha mostrado Venezuela como local, ¿debería la Vinotinto seguir confiando en el Monumental de Maturín para mantener esta fortaleza en sus próximos encuentros?