La «Vinotinto» concluyó el 2024 con un rendimiento desmotivador para muchos en las Eliminatorias Sudamericanas rumbo a la Copa del Mundo 2026.
Tras disputar seis partidos en el año, el combinado dirigido por Fernando “Bocha” Batista acumuló apenas tres empates y tres derrotas, un balance que lo deja fuera de los puestos de clasificación y con el panorama cada vez más complicado.
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Un año sin triunfos y con altibajos
Venezuela arrancó el año con optimismo, ubicada en la cuarta posición de la tabla tras un sólido cierre en 2023, incluso por encima de selecciones como Brasil y Ecuador. Sin embargo, el rendimiento se desplomó en los primeros compromisos del año.
La debacle comenzó en marzo con una goleada 4-0 ante Bolivia en la altura de El Alto. En casa, tampoco se pudo celebrar, Venezuela empató 1-1 con un Uruguay diezmado por bajas sensibles y no logró imponerse ante una Argentina campeona del mundo que, pese a un duro partido, se llevó un empate sin goles.
En octubre, el golpe llegó con una derrota 2-1 frente a Paraguay en Asunción, en un encuentro marcado por errores defensivos y la falta de contundencia en ataque.
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El cierre del año mantuvo la tónica, el pasado 14 de noviembre se logró un valioso empate ante Brasil, pero apenas cinco días después se cayó por 2-0 frente a Chile en Santiago, un rival al que se había vencido cómodamente en 2023. Ese triunfo en casa contra la Roja fue, precisamente, la última victoria de Venezuela en estas eliminatorias.
De la ilusión al bajón en la tabla
Con solo tres puntos de 18 posibles en el año, la Vinotinto cerró el 2024 en una preocupante posición en la tabla.
De estar en zona de clasificación directa, Venezuela cayó al octavo lugar con 12 puntos, superada por Bolivia y cada vez más lejos de los puestos que otorgan boletos directos o el repechaje.
