Los Navegantes del Magallanes se llevaron una victoria inolvidable al dejar en el terreno a sus «eternos rivales», los Leones del Caracas, con una pizarra final de 12 carreras por 9. El héroe de la noche fue Luis Sardiñas, cuyo cuadrangular con dos hombres en base desató la euforia de los 10.451 espectadores presentes en el estadio José Bernardo Pérez de Valencia.
El Clásico fue un verdadero espectáculo de «toma y dame», digno de la rivalidad Caracas-Magallanes, con emoción de principio a fin. Aunque el panorama lució desfavorable para el home club en varios momentos, los «filibusteros» sacaron a relucir su garra para imponerse y extender su dominio en la serie particular a 4-1.
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Toma y dame
Los Leones madrugaron con una carrera en el primer inning gracias a un elevado de sacrificio de Leandro Cedeño. Sin embargo, la respuesta del Magallanes fue inmediata y contundente: el debutante dominicano Andretty Cordero y Luis Suisbel conectaron sendos cuadrangulares en el mismo episodio, poniendo la ventaja en 4-1 para los turcos.
El Caracas, mostrando tenacidad, se acercó progresivamente y luego dio un golpe de timón en el cuarto, volteando la pizarra a 6-4 con jonrones de Brainer Bonaci (dos carreras) y Leandro Cedeño (solitario).
La Nave no se rindió. El juego se empató a seis en el sexto inning gracias a un vuelacercas de Eliezer Alfonzo Jr., pero los «melenudos» volvieron a tomar la delantera con un rally de tres anotaciones en el séptimo. A pesar de la desventaja, Magallanes peleó: una carrera anotada por Cordero tras un error del campocorto Bonaci y un doble productor de Carlos Rodríguez en el octavo acercaron el marcador a la mínima.
Cierre de película
Llegó el noveno inning y el Magallanes estaba abajo. La responsabilidad cayó sobre Amilcar Chirinos, quien dominó a la ofensiva caraqueña por la vía rápida, manteniendo viva la esperanza. Sus compañeros en el home plate se encargaron de recompensar su labor.
El inning del triunfo comenzó con paciencia. Un boleto a Luis Suisbel y un error en fildeo del jardinero Harold Castro a batazo de Rougned Odor llenaron las bases. Fue entonces cuando Yasiel Puig demostró su experiencia, conectando un hit por el jardín derecho que igualó las acciones.
Con el juego empatado y dos hombres en base, la mesa estaba servida para el clímax. Luis Sardiñas conectó el batazo que mandó la pelota más allá de la cerca, sentenciando el juego y desatando el delirio en Valencia.
La victoria fue para el relevista Amilcar Chirinos (1-0), mientras que Carlos Hernández (0-1) cargó con la derrota.
